Basado en la película del mismo nombre, RoboCop 3 nos presenta un capítulo más de las aventuras del oficial Alex J. Murphy, cuyos cerebro y cara fueran transplantados al cuerpo de un robot policía luego de haber sido declarado clínicamente muerto.

RoboCop ha encontrado su segunda familia en un grupo de ciudadanos de los barrios más rezagados de Detroit, quienes ven amenazados sus hogares por el nuevo proyecto de la agonizante OCP: la construcción de Delta City. Para asegurarse de que nadie se opondrá a tales planes, esta corporación ha impuesto un nuevo grupo de seguridad ciudadana: brutales mercenarios conocidos como los Rehabs. Por supuesto, los mercenarios acaban apuntando sus armas contra los indefensos civiles, por lo que nuestro héroe toma una importante decisión: se unirá a la resistencia para luchar por su nueva familia.

Luego de la aceptable recepción que RoboCop (1989) y RoboCop 2 (1990) lograron en la NES, se decidió que el lanzamiento de una tercera parte se realizaría tanto en 8 como en 16 bits. Sólo que, esta vez, el resultado sería diferente... La primera aparición de RoboCop en la SNES fue una decepción para sus seguidores. Intentando repetir una fórmula ya clásica, el juego ofrece diversas armas, muchos enemigos diferentes... y etapas de una dificultad que raya en lo exagerado. Este RoboCop es especialmente lento, de movimientos pesados y poca maniobrabilidad; hasta el más simple de los enemigos puede complicarte la existencia, y en algunas áreas resulta imposible pasar sin que te quiten la mitad de la energía. Además, deberás atravesar plataformas en donde la escasa capacidad de salto de RoboCop se vuelve algo sumamente frustrante, y zonas de vuelo, que exigirán mucha habilidad en los controles. Por otro lado, tendrás bastante resistencia a los ataques normales, y el arsenal a tu disposición es más amplio que nunca.

Gráficamente, el juego exhibe detalles bastante respetables para 1992; aún en su lentitud, hay agradables animaciones y todo funciona con fluidez. Los sonidos son inequívocamente los clásicos del protagonista, y la música, aunque genérica, es acorde a la acción.

RoboCop 3 fue uno de aquellos raros casos en que la NES superó a los 16 bits... pero probablemente este título será mejor apreciado por los fanáticos de este torturado policía.

• Año: 1992
• Fabricante: Ocean

Como resultado de un experimento de manipulación genética, un grupo de científicos ha clonado un numeroso grupo de dinosaurios y criaturas prehistóricas que, agrupados en una isla, son exhibidos como la principal atracción de un parque temático llamado Jurassic Park. Por supuesto, el parque cuenta con animales peligrosos como tiranosaurios y velociraptores, pero se mantienen controlados por un sistema de seguridad de alta tecnología que permite mantener al público a salvo.

Todo marchaba a la perfección, hasta que una serie de fallas humanas y técnicas lograron acabar con todas estas medidas. Ahora los dinosaurios vagan libres por toda la isla... cazando a los turistas.

Siguiendo la ambientación y temática de la película, en este juego encarnas al Dr. Alan Grant, quien deberá cumplir con la misión de recolectar huevos, reactivar los sistemas y escapar de los dinosaurios. Tendrás a tu disposición diferentes armas, tarjetas de identificación para acceder a diferentes niveles, y accesorios como lentes de visión nocturna, que te permitirán explorar edificios desprovistos de luz eléctrica (aunque sus ascensores y puertas eléctricas aún funcionan...).

Las gráficas son detalladas y agradables, con personajes y dinosaurios totalmente reconocibles y bien animados. Todo esto cuando estás en los terrenos del parque, claro, porque cuando entras a los edificios la historia es diferente: el juego presenta entonces una vista en primera persona al estilo Doom, pero con una pixelación digna de los antiguos Atari. En esos momentos es cuando la música te impulsa a seguir, porque aunque escasa, logra un ambiente de misterio propio de encontrarse en una casa llena de dinosaurios, sin más armas que... un lanzacohetes. En cuanto a los controles, son simples, pero deberás acostumbrarte a calcular distancias y alinear tus disparos.

Tendrás muchísimas cosas que hacer en Jurassic Park cuando aprendas a recorrerlo con soltura; probablemente, pronto te encontrarás intentando cumplir con las misiones que te han encargado. Después de todo, es uno de aquellos juegos donde lo bueno y lo malo se mantienen bien balanceados.

• Año: 1993
• Fabricante: Ocean

Se presenta un soldado del ejército del sistema solar Illis. Posiblemente este mensaje no sea copiado por nadie, pero desde mi nave os transmito esperanza. He visto caer a mucha gente, amigos, familiares, compañeros de armada y mucha población civil, bajo una despiadada fuerza alienígena invasora. Por lo que me fue transmitido, debo enfrentarme a la Armada de la Aniquilación. Sus naves son mucho más numerosas, grandes, rápidas y avanzadas que las nuestras; por suerte, aún sigue en pie una de las mejores, D117B Axelay, mi nave de combate. Durante siglos hemos estado en paz, y por eso sólo contábamos con un reducido número de armas y defensas; pero ahora debemos responder a esta amenaza con lo poco que nos queda. No hay tiempo, no hay más soldados; sólo yo, pilotando Axelay. Ellos son miles y yo solo uno... mis posibilidades son escasas, así que deseadme suerte. Traeré la paz a este marchito sistema, cueste lo que cueste.

Muchos años después...

... Y así, el valiente soldado despegó hacia la inmensidad. Todo lo que se, es que lo último que hizo fue mirar la foto de su familia; en sus ojos entristecidos y cristalinos brillaba la furia, mezcla de un dolor amargo y una sed de venganza irreparable. Su mensaje si llegó a muchas personas, que le enviaron fuerzas. Su mensaje despertó la ilusión por vivir de todos. Se marchó a liberarnos en una misión suicida. Le doy gracias a ese valiente piloto, pues fue el último rayo de luz que tuvo antaño este sistema.

Axelay es, posiblemente, uno de los mejores Shoot ‘em Up que tuvo SNES, y de todos los tiempos. Fue creado con la motivación de todo un equipo, que resultó ser el mismo que estuvo a cargo de Super Castlevania IV y Contra III: The Alien Wars; algunos de ellos formarían más tarde la compañía Treasure. En aquella época no buscaban riqueza, sino el reconocimiento por un trabajo bien hecho; los fans de la época supieron devolverles el favor, y aún más los de hoy en día. Pese a que sus ventas no fueron muy numerosas, al pasar a segundo plano por detrás de otros grandes de la industria, Konami hizo un juego irrepetible, tan épico como divertido.

Una palabra que puede definir este título es difícil. Contando con tres modos de dificultad, ya el estándar hace que nos atragantemos. Si tu paciencia es limitada Axelay llegará a desesperarte, pero si buscas un desafío, se convertirá en uno de tus favoritos. A nivel de jugabilidad encontramos algo grandioso, casi indescriptible: ya en 1992 pudimos disfrutar de un discreto sistema cuasi-3D. Usando el Modo 7, Konami fue una de las primeras compañías en descubrir el potencial de la SNES, y nos enseñó que usándolo con ilusión y de una manera profesional, pueden salir grandísimas joyas.

Axelay se divide en dos patrones, o dos tipos de niveles: Los que tienen vista vertical, en donde afloró el modo 7 (los niveles impares), y los niveles con vista horizontal (los pares). En total son 6 niveles llenos de acción, decenas de naves, muchos disparos y sorprendentes jefazos. Debemos elegir antes de cada nivel tres armas, divididas en 3 tipos; a saber, llevaremos con nosotros: Un arma principal delantera (POD), un arma lateral auxiliar (SIDE) y un arma de emergencia trasera (BAY). Conforme el juego avance, podremos disponer de más armas; saber combinarlas nos ayudará bastante, porque hay enemigos duros de pelar que, con ciertas armas, nos resultarán imposibles. Axelay dispone de un disparo "normal", por llamarlo así, que no se corresponde con ninguna de sus armas principales, y aquí viene una de las cosas más interesantes: a veces no moriremos de un disparo, como en los clásicos Shooters. En lugar de ello, una de nuestras tres armas se desprenderá, no pudiendo recuperarla hasta que perdamos una vida. Esto hace el juego muy interesante, puesto que tendremos que seguir el nivel con un arma menos; si tenemos la mala suerte (o buena, si estás al límite de vidas) de quedarte sin armas, se activará este disparo normal, acompañado de unas pequeñas bombas, que se disparan con el botón A, que a su vez sirve para disparar el arma de emergencia trasera (BAY). Cabe reiterar que sin ciertas armas, el juego se vuelve imposible; algunos enemigos serán muy difíciles de matar así. En ocasiones, si nos chocamos con ciertas cosas, la nave se desintegrará sin más remedio. Mucho cuidado con el manejo de la nave: a diferencia de otros Shooters, no tendremos Power-Ups dispersos por los niveles ni nada así. Todo depende de tu habilidad, de las vidas, y de los Continues restantes. Al final de cada nivel nos espera un jefe, y por la mitad un sub-jefe. Tus reflejos deberán estar a la orden del día en Axelay.

Gráficamente, quedaremos embobados. Los niveles verticales son asombrosos; dan la sensación de estar sobrevolando un planeta a gran altura, y de que los enemigos y objetos están en 3D. Un buen ejemplo de ello es sobrevolar la ciudad del nivel 3, y ver cómo se aleja la superficie de suelo rojo, toda una osadía de belleza. Los Sprites están muy bien dibujados, al igual que los fondos planetarios y espaciales, que cuentan con una abrumadora y magistral profundidad, tanto en los niveles verticales como horizontales. Mención especial para los jefes, seres enormes, máquinas atroces y de forma monstruosa, que nos esperan ansiosos. De todo vas a ver: desde arañas robóticas hasta armas biomecánicas. Todo buen fan de los monstruos japoneses enormes e imposibles no debe perderse Axelay, pues es una exhibición de locura. Los enemigos estándar también cuentan con buena apariencia: nunca se repetirán de una escena a otra, y aunque algunos sean mejorables, cumplen su función: dispararnos. Las animaciones de rayos, explosiones y disparos son buenas; aunque SNES posteriormente nos enseñó mejores efectos, no debemos quejarnos de la buena calidad gráfica de Axelay. Según mi opinión, "Axelay parece un juego de 1995 pero en 1992". Para mí, la belleza que denota este juego se plasma en quedarte boquiabierto a cada rato. No puedo dejar de sorprenderme.

Toda obra maestra del género debe ir acompañada de una rompedora banda sonora. Axelay no es la excepción, es la regla general. Contiene temas que harán que se te salten las lágrimas si la SNES es lo tuyo; cada nivel cuenta con dos temas, el principal y el tema del jefe. La nostalgia nos sirve en un plato caliente estas melodías, que te gustarán sí o sí. Es considerada también una de las mejores de SNES, y es que Konami se lució. Mención especial para la canción "Mother", del nivel 3... indescriptible amalgama de placer. Cada canción se amolda de maravilla al nivel que jugamos; es extraño, pero a pesar de los enfados que podamos coger al perder, la música nos lo compensa con creces. Los efectos de sonido son variados, aunque ciertamente limitados, cosa comprensible. Cumplen su función.

No debemos cegarnos por su maestría, tiene algún fallo a destacar: La rejugabilidad. Será indispensable para algunos, pues perderemos tantísimas veces que tendremos que aprendernos de memoria cada nivel... hasta que, cuando lo completes, no te darán demasiadas ganas de volver a tocarlo. Eso si, alguna vez en tu vida lo volverás a jugar. Por otro lado la previsibilidad: los esquemas de los niveles no cambian; se echa en falta un sistema de enemigos "con respawn aleatorio", es decir, que no siempre ataquen los mismos enemigos y que salgan de los mismos sitios. A pesar de esto, concluimos el tercer defecto; su endiablada dificultad. Tal es así que algunas muertes vendrán de manera totalmente injustificada, a pesar de que juegues bien. Más de una vez dirás: "¿QUÉ? ¡Pero si no me has dado!". Si eres fan de esta frase vete acostumbrando a ella, en Axelay la vas a decir muchas veces... La crítica no es que el juego sea difícil (cosa agradecida por todo retro), es que a veces resulta imposible. Por otro lado, algunos jefes tienen muy poca energía, y podrás acabar con ellos relativamente rápido si sabes cómo: ciertamente la proporción de dificultad etapa / jefe pudo haber sido más balanceada.

En conclusión, si no conoces este juego, sal de la caverna y pruébalo. La luz te cegará, pero valdrá la pena. Es obligatorio.

Axelay fue merecedor de un proyecto de continuación, que tristemente nunca llegó a concretarse: si terminas el juego en Hard dos veces consecutivas, verás la leyenda "See you later in Axelay 2". Por otro lado, una curiosidad notoria es que la nave Axelay puede ser desbloqueada y jugada en el Shmup Airforce Delta Strike de Playstation 2... completamente remodelada en 3D.

• Año: 1992
• Fabricante: Konami

Al mando de la nave de combate R-9, tendrás la misión de destruir al Imperio Bydo, una terrible horda de invasores que amenaza la paz del universo. Está claro que enviar una pequeña nave en contra de un imperio completo es algo lo suficientemente justo, pero nada más por si las dudas, podrás equiparla con armamentos de la más diversa índole, y diferentes sistemas de ataque.

Luego de la mala pasada del juego Super R-Type, Irem se vio en la necesidad de reivindicar la serie lanzando un nuevo título. El resultado, R-Type III, cumplió su objetivo con creces, llegando a convertirse en uno de los mejores Shoot'em Up que pasaron por la Super Nintendo... y también en el más frustrante. Su dificultad es legendaria, y aunque los controles son simples y de excelente respuesta, necesitarás de mucha pericia para mantenerte con vida a medida que avanzas por etapas cada vez más complejas.

Las gráficas son simplemente alucinantes; mucho detalle, uso y no abuso del modo gráfico 7, y con más cuadros de animación que cualquiera de los Shooters existentes hasta ese momento. Los sonidos no son especialmente destacables, pero la música combina ritmos metaleros con temas remezclados de las anteriores entregas, creando una banda de sonido memorable.

Este es uno de esos juegos que no puede faltar en ninguna colección... sobretodo si lo que buscas es un buen desafío.

R-Type III continúa las aventuras presentadas en R-Type (1991) y R-Type II (1992), ambos de Game Boy. Su historia no se relaciona con la de Super R-Type (SNES), ni continúa la de R-Type Leo (Arcade).

• Año: 1994
• Fabricante: Irem

Efectos de la política de censura de Nintendo

Comparado con la versión japonesa:

Se modificó el ataque del jefe del nivel 2, para verse como ojos y no como algo parecido a espermatozoides.

• Año: 1992
• Fabricante: Konami

Efectos de la política de censura de Nintendo

Comparado con la versión japonesa:

- En la presentación, se eliminó el cigarro del moai.

- En el nivel 2, se cambió la cruz del payaso noqueado por una llave de cuerda.

- En el nivel 3, tras el muro de esferas, se eliminó un desnudo al estilo Venus.

- También en el nivel 3, se modificó el gesto de los jefes-boca, por considerarse sugestivo.

- En el nivel 7, se cambió el uniforme de las conejitas para evitar asociaciones con temas adultos.

En una nueva versión de un juego que ha pasado por casi todas las plataformas, Choplifter 3 te permitirá tomar el mando de un helicóptero de combate, con la misión de incursionar en terreno enemigo para rescatar a una serie de rehenes.

Choplifter 3 llega a la SNES luego de una versión en NES y otra en Game Boy. Siguiendo la línea que caracteriza a estos juegos, tu misión es liberar rehenes, subirlos a tu helicóptero y llevarlos a la base. Podrás moverte con libertad a través de escenarios simples y bien trabajados, con enemigos y rehenes que ocupan la menor cantidad posible de pixeles, muchas explosiones, y un helicóptero bien diseñado y dibujado. La música es genérica y sin mayores sorpresas, pero los efectos de sonido son realistas y dan ambiente a la acción.

La jugabilidad se ha mantenido intacta, y tiene todos los elementos que caracterizan al juego: un buen manejo de los giros, muchas armas, enemigos que reviven apenas salen de pantalla y rehenes que resisten sin problemas la explosión del edificio en donde estaban cautivos. Y tal como ha sido siempre, enfrentarás varios niveles, esta vez 16, haciendo lo mismo una y otra vez... lo que no te impedirá disfrutar de cada uno de ellos, si eres adicto a los helicópteros!

Creado para la Apple II en 1982, y con una reciente versión para la consola PS2, Choplifter es un clásico siempre vigente, emocionando por igual a los antiguos y nuevos jugadores.

• Año: 1993
• Fabricante: Beam Software